martes, 28 de julio de 2009

E.K. Party!

Y con el sueño totalmente cambiado (llevo despierta desde las 5.30), inicio este bendito post de la Euskal Encounter XVII!! Porque estoy cansada, tengo ojeras de aquí a Cuenca y los moratones y rasponazos cubren una parte importante de mí, pero por amor del cielo, ¡Qué BIEN me lo he pasado!

Pero empecemos por el principio: El miércoles, feliz de la vida (aunque con un cable menos, pues el de alimentación del disco externo había desaparecido) empaqueté todo lo referente a mi ordenador y esperé a que el Cosmopolita me recogiese para ir rumbo al BEC, dónde Noffy y Take Take ya estaban instalados. Tras unos 45 minutos de cola y una caída de red, tuvimos nuestras txartelitas acreditativas (01038!! Y me lo sé sin mirar xD) y allá que nos instalamos en nuestros respectivos sitios, a esperar a la marabunta de frikis. Tras estar hasta las 3 y algo de la mañana, me fui a casa totalmente feliz, aún sin saber lo cansada que podría llegar a estar.

El Jueves, después de una ducha reparadora y un paseíto en bus (sí, el BEC está como a 20 minutos de mi casa, pero la pereza y mi persona somos uno) allá que llegué, a descargarme cositas, visitar a gente, comer guarrerías y tirarme-por-el-tobogán. Porque si en la Guipuzkoa Encounter estaba el spa, quí trajeron un tobogán hinchable gigantesco por el que me tiré, varias veces. La primera bajo los efectos del Burn Day y el Peché, en magnífica combinación. Lo cual tuvo sus consecuencias: Cuando bajé por la acolchada pendiente sobre la minitabla de surf frené de morros… literalmente: Aún mantengo resto del rasponazo que me pegué en la barbilla. Por otro lado, conocí a gente muy interesante: La mujer Pelirrosa y su hermano, el TecnoVikingo, quien me llevó a casa (de nuevo sobre las 3 y pico).

El Viernes por la mañana comencé a sentirme cansada: Llegué más bien tarde (y menos mal que el Cosmopolita tuvo a bien llevarme) y el día se me pasó volando: Que si ir para allí, que si volver para allá, que si visitar a nosequién, que si tal o cual pasaban a saludar, que si me vuelvo a tirar por el tobogán… La verdad es que creo que fue el día que menos he estado en el ordenador XD. El ModPeCero y mi persona nos pasamos por la Retro Euskal, dónde se estaba jugando en vivo una partida de space invaders, y como buenos extraterrestres que somos, hicimos lo posible para que los marcianitos ganaran (aunque no hubo suerte). Un poco más trade, Watachan y el Cosmopolita vinieron también y allí estuvimos, mirando consolas viejunas (de la infancia de los señoritos xD). Allí mismo también hice la compra del día: una camiseta de ¿Invades o Trabajas?, de la cual me enamoré perdidamente.

El Sábado llegué sobre las dos, dos y pico, y tras comer en el buffet libre – wok del chino me quedé frita en la tienda de campaña de Noffy y Take Take durante dos largas horas que me sentaron de maravilla. Después de tirarme un par de veces más por el tobogán, fui mariposenado de acá para allá, y el Lupus y yo fuimos a conocer a grandes del Webcomic: Laian, Morán e Ismurg estaban también en la Euskal, a escasos metros de nosotros, mientras que Kheldar y John Weel curioseaban por la party. Hice algo de lo que me siento terriblemente orgullosa y feliz: Ni corta ni perezosa, le estrujé los mofletillos a Ismurg (quien por cierto está tirando a delgadísimo xD), lo cual me sirvió para obtener de él un fanart y una conversación muy interesante ^^. Como era la última noche, decidimos quedarnos hasta tarde, y hasta las 6 de allí no nos movió nadie.

El Domingo, como punto final llegué casi a las cuatro de la tarde. Derrotada y sintiéndome mayor. ¿Dónde se han quedado mis energías…? En fin, repartición de premios, despedidas varias y recogida de trastos, con un sabor de boca increíblemente dulce y con unas ganas de volver terribles. Por la tarde, la Alemana y su novio, Take Take, Noffy, Watachan, el Cosmopolita, el Chico, el TecnoVikingo y mi persona fuimos al Ballonti a tomarnos la última, a cenar e intercambiar teléfonos, con la idea de que un año no es tanto tiempo.


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